No te confundas, no necesitas ser un genio para aprender lo que te catapultará al éxito

Volverte un super estudiante es una de las destrezas más importantes que necesitas para triunfar en el siglo veintiuno. En esta edad de cambios tecnológicos acelerados, mantenerte al frente depende en gran forma de educarte a tí mismo constantemente.

En un mundo que cambia aceleradamente, la habilidad de aprender nuevas técnicas tan rápido como sea posible se está volviendo una imperiosa necesidad. La buena noticia es que no necesitas ningún don especial para aprender algo nuevo, incluso cuando trabajas a tiempo completo.

Muchos eruditos, que han llegado a ser excelentes en varias disciplinas a la vez, incluídos Leonardo da Vinci, y otros más modernos, como Arnoldo Bloom, Jorge Steiner y el físico premio nobel Ricardo Feynman, dijeron no tener excepcional inteligencia.

Todos tenemos suficiente capacidad cerebral para dominar nuevas disciplinas usando las herramientas requeridas, el acercamiento correcto, y aplicando lo que aprendemos adecuadamente. Casi todo el mundo puede aprender cualquier cosa, si usa la técnica correcta.

Técnicas adecuadas de aprendizaje puede hacer que el proceso sea hasta divertido. La clave para aprender una nueva disciplina no es complicada. Si apuntas a adquirir una nueva destreza para mejorar este mismo año tu carrera, algunos de los hábitos que mencionamos a continuación, puede serte sumamente provechoso.

1. Grandes estudiantes leen mucho

Leer es para la mente lo que el ejercicio es para tu cuerpo. Te da la libertad de vagar en las expansiones del espacio, el tiempo y la historia, y te proporciona una visión profunda de ideas, de conceptos, de emociones y de un mundo repleto de conocimientos.

Tu cerebro se activa cuando lees, crece, y genera nuevas conecciones en múltiples parámetros, dependiendo del tipo de material absorbes. Lo repetimos, estudiandes exitosos leen un montón.

De hecho, muchas de las perosnas más exitosas comparten su gusto por la lectura, ellos no perciben el leer como una carga sino como una oportunidad de mejorar sus vidas, sus carreras y sus negocios.

Elon Musk creció leyendo dos libros por día, de acuerdo a afirmaciones de su hermano. Bill Gates lee cincuenta libros por año. Marcos Zuckerberg lee por lo menos un libro cada dos semanas. Warren Buffet utiliza de cinco a seis horas por día, leyendo periódicos, y quinientas páginas de reportes corporativos.

El autor de este artículo leyó cientos de libros a muy temprana edad.

En un mundo donde la información es la nueva moneda, leer es la mejor fuente de educación continua, conocimiento y adquisición de grandes cantidades de esa moneda.

2. Los super estudiantes ven el leer como el camino, no el destino final.

Leer es un recorrido, es el descubrimiento de conocimientos nuevos, no la meta. Es un proceso de vida disfrutable, un auto dirigirse, un jornada donde administramos el largo y el tiempo de nuestros pasos en el proceso de descubrir. Entender nuevos tópicos, ideas o formas de pensar requiere no solamente el observar con entusiasmo sino también y más fundamentalmente, curiosidad sostenida.

Según afirma Sonia Malik, de IBM, “el recorrido del aprendizaje es una colección seleccionada de bienes, formales e informales, que pueden ser usados para adquirir aptitudes para un rol específico o una destreza tecnológica”

Aprender es una inversión que usualmente se paga sola, cuando aumentan las ganancias. Más que siempre, aprender es una tarea de por vida si quieres permanecer relevante, indispensable y colaborar en el mundo del trabajo.

Los super estudiantes valoran el proceso. No tienen una meta final, buscan el mejorar con consistencia. Ellos continúan perfeccionando nuevos principios, procesos, puntos de vista, modelos de pensamiento y otros objetivos. Su permanente, voluntaria y auto motivada búsqueda de conocimiento es importante para su madurez.

3. El estudiante adquiere una mentalidad madura

No puedes fallar si cultivas la madurez de tu mente, dice la doctora Carola Dweck, quien desarrolló una teoría de aprendizaje que gira alrededor de la creencia que tu puedes mejorar por tí mismo.

El ignorante del siglo veintiuno no será aquel que no sepa leer ni escribir. sino quienes no puedan aprender, borrar lo aprendido y reaprender, argumenta Alvin Toffler, un escritor futurista y hombre de negocios conocido por su trabajo en la creación de tecnologías modernas de aprendizaje.

Cultivar una mentalidad que crece o que se adapta, puede ayudarte a focalizar más en las metas deseables en la vida. Puede influenciar tus motivaciones para hacer que te mantengas alerta, como forma de descubrir las oportunidades de aprender y crecer en esas habilidades.

4. Los super estudiantes les enseñan a otros lo que saben

De acuerdo con investigaciones realizadas, los estudiantes retienen aproximadamente el noventa por ciento de lo que aprenden cuando explican o enseñan sus conceptos aprendidos a otros, o los usan inmediatamente.

Enseñar a otros lo que sabes es una de las formas más efectivas de aprender y recordar nueva información. Psicólogos la llaman recuperación práctica. Is una de las formas más confiables de edificar cadenas de memoria más fuertes.

Aprende enseñando a otros un tópico en términos simples de forma tal que puedas rápidamente encontrar los vacíos en tu conocimiento, es un modelo menta acuñado por el famoso físico Richard Freu

Conocido como el Gran Expositor, Feyman era reverenciado por su habilidad de ilustrar en forma preciosa densos tópicos como el quantum físico a virtualmente cualquier persona. La técnica Feyman es explicada claramante a su vez, en la biografía de Santiago Gleick: “Genios: la vida y ciencia de Richard Feyman”

La más crítica prueba de tu conocimiento es tu capacidad de tranferir a otros tu conocimiento. Una mejor forma de de aprender, procesar, retener, y recordar información es repartir el tiempo, mitad para aprender y mitad para compartir lo apendido. Por ejemplo, en vez de completar un libro, apunta a leer el cincuenta por ciento y procura recordar, compartir o escribir las ideas claves que aprendiste antes de hacerlo.

5. Estudiantes efectivos cuidan su mente

Mantener tu mente saludable significa mantenerla atenta. Lo que hagas o dejes de hacer por tu mente puede significativamente cambiar como recuerdas, procesas, y traes al momento la información. Todos quieren vivir una vida activa hasta el final de sus días. Este objetivo depende de un cerebro saludable y robusto.

Eso significa digerir muchos ingredientes asociados con el enlentecimiento de la declinación cognitiva: vegetales, hojas verdes de espinaca y brócoli, granos enteros, proteínas de pescado, y legumbres. Tambien se debe elegir saludables grasas no saturadas, como el aceite de oliva en lugar de manteca.

Frutas y vegetales combaten los oxidantes relacionados con el estrés que causa el desgaste de las neuronas, dice el doctor Gary Small, un profesor de siquiatría del envejecimiento.

Nuestros cerebros declinan naturalmente si no hacemos nada para protegerlos. Sin embargo, si reaccionas tempranamente, puedes enlentecer ese proceso. Es más fácil proteger un cerebro saludable que tratar de reparar el daño una vez que se ha extendido.

6. Los estudiantes expertos se toman un descanso tempranamente

El descansar es crucial para retener lo que fuera que quieres aprender. De acuerdo con investigaciones recientes, tomar descansos cortos, tempranos y frecuentes, pueden ayudar a aprender las cosas e incluso mejorar tu porcentaje de retención.

“Todos piensan que necesitas practicar, practicar y practicar” cuando aprendes algo nuevo. En lugar de ello, encontramos que descansar, temprano y frecuente, puede ser tan crítico para aprender como la práctica.” dice Leonardo Cohan, un veterano investigador de NIH, Instituto Nacional de Desórdenes Neurológicos y Ataques Cerebrales.

Mejores descansos ayudan al cerebro a solidificar memorias durante los períodos de reposo. Sea lo que fuere que elijes para aprender en el sobre tiempo, es importante que optimices el descanso para mejores resultados.

Expertos del Centro académico para el éxito, de la Universidad Estatal de Louisiana, recomiendan sesiones de treinta a cincuenta minutos. “Cualquier tiempo de menos de treinta minutos no es suficiente, y cualquier tiempo de más de cincuenta minutos es demasiado información para que tu cerebro la pueda procesar de una sola vez”, dice la asistente graduada de aprendiendo estrategias, Elena Dunn.

La red neurológica de nuestro cerebro necesita tiempo para procesar la información, es por eso que espaciando tu aprendizaje te ayuda a memorizarla más eficientemente, le otorga a tu materia gris tiempo suficiente para descansar y recuperarse.

Autor: Roosevelt Jackson Altez -REJA-

Roosevelt es autor, escritor, dibujante, artista.

Su última novela: “ Las violentas vetas del volcán” está disponible en Amazon. Tambien es autor de diversos blogs, y historias cortas.

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